Cómo es lógico y normal, nuestro caballo necesita un lugar en el que descansar y refugiarse durante todo el año.
Este sitio puede tratarse de un establo de caballos, de un granero, de una cuadra, etc. Será suficiente con que el lugar cuente con espacio suficiente para el caballo y para su cama, ya que de otro modo le será imposible descansar cómodamente.
Es importante prestar atención a la cama ya que aunque los caballos puedan dormir de pie, descansarán más y mejor si lo hacen tumbados. Y cuidado con el suelo de la cama, si la superficie es demasiado dura es probable que con el tiempo esto le acabe provocando una lesión.
LA ALIMENTACIÓN
Una correcta alimentación es clave para prevenir enfermedades y ayudar al équido a mejorar su rendimiento. Es importante tener en cuenta que el sistema digestivo del caballo funciona correctamente cuando se escoge la alimentación de forma adecuada, según la etapa de desarrollo y crecimiento en la que se encuentra.
LA CAMA
Una cama adecuada en la cuadra es vital para los caballos. Ellos no deben permanecer todo el tiempo en una superficie dura, ya que necesitan poder recostarse y descansar. La paja es una opción muy popular para preparar el lecho de un caballo por ser barata, cálida y confortable. Sin embargo, en ocasiones contiene esporas de hongos y además el caballo suele comerse esta paja.
Se recomienda el uso de virutas de madera sin polvo ya que son limpias e higiénicas. También se puede usar revestimiento de goma suave para preparar un descanso más confortable, así como una superficie más agradable para cuando el caballo esté de pie, poniéndose siempre virutas de madera en la parte superior de la misma para proporcionar calor. Recientemente el cáñamo se ha convertido también en una opción popular para estos fines, ya que permite mantener la cama limpia, tiene un gran poder absorbente (hasta 6 veces su peso), retiene los olores y evita la aparición de problemas respiratorios.
Ventilar el lugar y remover la cama
Fundamental para que no se apelmace y se refresque un poco.
Sacar el estiércol
Será recomendable varias veces a día. Si no lo hacemos nuestro caballo puede acabar contrayendo alguna enfermedad.
También es recomendable pintar al menos una vez al año la caballeriza, ya que la pintura desinfecta y acaba con cualquier bacteria que anide en ellas.
CUIDADOS DIARIOS
Facilitar el acceso a pasto, forraje y piensos concentrados adecuadamente. Si la alimentación es a base de heno, el caballo debe comer aproximadamente entre el 2% y 3% de su peso corporal cada día.
Revisar realizando una inspección ocular en busca de signos de enfermedad como ojos y nariz llorosos, sonidos de tos o mucha saliva; o lesiones como rasguños, cortes o heridas. En caso de signos de enfermedad se deberá contactar lo antes posible con el veterinario. Ante cualquier lesión se deberá actuar inmediatamente. Para ello, se debe tener un botiquín de primeros auxilios para caballos disponible en las mismas instalaciones.
CUIDADOS MENSUALES
Si tus caballos se mantienen en una instalación ecuestre o hípica en pupilaje, asegúrate de que su cuota de mantenimiento se paga en tiempo y forma.
Cuánto ejercicio necesita un caballo
Dependiendo de la edad y la raza, el caballo necesitará más o menos ejercicio, pero como mínimo, todos los caballos necesitan ejercitarse una hora, cuatro veces por semana.
El descanso también es importante, así que por lo menos un día a la semana nuestro caballo deberá descansar completamente. Cuidado al hacer ejercicio. Si no calentamos al caballo, podrá sufrir alguna lesión. Al igual que nosotros calentamos antes de ir a correr, con el caballo debemos hacer lo mismo. Podemos empezar dando un paseo de unos 10 minutos. Seguidamente pasamos al trote y por último ya podremos galopar tranquilamente sabiendo que el caballo ha calentado correctamente.